Conservas caseras y mermeladas
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Ingredientes:
- Pimientos rojos
- Aceite de oliva virgen extra
- Dientes de ajo
Elaboración:
Los pimientos se limpian, se desechan los dañados y se ponen a asar sobre una parrilla de leña a fuego lento. Es preferible que la leña produzca el menor humo posible.
Los pimientos se asan hasta que tengan la piel casi negra, momento en que se retiran y se dejan reposar durante unos 10 minutos cubiertos con un paño para que suden y estén más blandos y sabrosos.
A continuación, se les retira la piel y las semillas con cuidado no se rompan si es que los vamos a conservar enteros y reservando el jugo que suelten.
A continuación se introducen en tarros previamente esterilizados junto con dientes de ajo (al gusto), parte del jugo de cocción y se completa con aceite de oliva hasta un centímetro del borde y cuidando que no queden burbujas de aire.
Se cierran y se introducen en una olla sin que se toquen y cubrir de agua. Poner al fuego hasta que empiece a hervir, unos 10-15 minutos.
Sacar los tarros y colocarlos boca abajo para que enfríen.
Almacenar después en un lugar que no tenga luz ni demasiada humedad.
Notas:
Si no se dispone de parrilla puede utilizarse el horno.
Marcar los tarros con el contenido y la fecha de envasado.
Conservar en un lugar seco, fresco, limpio y alejado de la luz solar y de olores intensos.
No se recomienda su consumo pasado un año desde la fecha de elaboración.