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La Página de Bedri
Relatos prohibidos
Mi primo Javi regresa
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Javi y yo ya nos habíamos mudado a un cuarto aparte y hacíamos vida de pareja, yo continuaba con mi trabajo de seguridad en una financiera y Javi tenia trabajos eventuales de programación de computadoras, éramos felices juntos, aunque todavía no declaraba abiertamente mi orientación sexual, mucha gente incluidos familiares sospechaban que nuestra relación era mucho más que de sólo primos.

Nuestra vida sexual había disminuido en algo y pensé que así era con todas las parejas cuando conviven, pero estaba equivocado, el muy desgraciado de Javi resultó embarazando a una enamoradita de su barrio y todo se acabó. Ni siquiera me dio la cara, solo me avisó en un mensaje de texto y se fue. Mi mundo se vino abajo y entré en una depresión horrible, todo lo que le di con amor se fue al tacho, mi primer hombre me engañó con una maldita mujer.

Durante mis días de lamento y dolor me examiné como homosexual y me di cuenta que aun no me veía como uno de ellos, mi cuerpo parecía de un hombre heterosexual: panza, vello en todo el cuerpo, piel maltratada y gordura por doquier, ello me llevó a pensar que Javi se aburrió de cómo me veo y decidí cambiar de apariencia.

En el trabajo era todo lo contrario, me ascendieron a Supervisor de Distrito y vi la oportunidad exacta para mi cambio de apariencia, en fin, con diferente uniforme pensé que no se notaría mucho el cambio.

Me compré cremas depiladoras y me depilé todo el cuerpo, también cremas suavizantes para la piel y me hice un tratamiento facial para eliminar vello y todo tipo de manchas y marcas, me depilé sutilmente las cejas, comencé una dieta estricta y me inscribí en un gimnasio para reafirmar abdomen, adelgazar y levantar el trasero.

Al cabo de un mes empecé a ver algunos resultados, me veía más cuidado y delicado, aunque sin llegar al extremo y me sentía mas seguro de mi mismo; en mi trabajo sabia que se murmuraba a mis espaldas de mi cambio y eso me gustaba.

A los dos meses el cambio era mucho más evidente, me contemplaba desnudo frente al espejo y me sentía deseado, pero quería ir más allá. Me compré ropa de mujer, maquillaje y una peluca, me fui a otro distrito, alquilé una habitación de un hostal, me vestí de mujer, con un vestido corto azul, tacos bajos, maquillaje sutil, una peluca negra, mucho perfume femenino y salí a una discoteca de ambiente, el lugar era tranquilo y agradable, sentía las miradas de los muchachos y me excitaba sentirme deseado. De vez en cuando algunos pasaban por detrás mío y rozaban su pubis con mi trasero, otros tocaban sutilmente mis duras nalgas y uno que otro me decían piropos subidos de tono, me sentí mas mujer ésa noche que en toda mi vida.

Seguí frecuentando el lugar un par de veces más, hasta que un día vi entrar a uno de mis subordinados del trabajo, lo observé de lejos y pude notar que gustaba de ese ambiente y de la compañía de homosexuales, pero opté por retirarme para no ser descubierto.

Convencido al fin de ser deseado por muchos hombres fui a buscar a Javi, me vestí aún mas provocativo y lo cité en un parque cerca de mi cuarto, cuando lo vi llegar me dio tristeza, estaba desarreglado y pesaroso, me vio y se sorprendió, trató de abrazarme pero lo retiré

—Vamos al cuarto si quieres —Le dije.

— Vamos entonces —Contestó emocionado.

En el camino no dejaba de admirarme, trató de tocarme pero lo volví a evitar. Una vez en el cuarto me tumbó sobre la cama y me empezó a besar y a acariciar todo el cuerpo, sentí su pene durísimo bajo el pantalón y cuando se desnudo lo bote del cuarto tal como estaba.

— dile a tu mujercita que lo que yo te di, nunca nadie te dará.

No escuché reclamos ni suplicas, lo mandé calato a su casa a inventar quién sabe qué excusa a su mujer.

Yo me había excitado al ver a Javi desnudo y después de un rato me fui a la disco a ligar al primero que me insinué algo, no tuve que esperar mucho, un joven morocho, alto y de hermosos ojos me dijo que estaba preciosa y me derritió,  me dejé llevar y no me arrepiento, fuimos a su departamento y me trató como una mujer, me besó todo el cuerpo y me acaricio las nalgas, me mostró su largo pene y se lo chupé con frenesí, estaba delicioso y no quería parar, luego se puso un condón con aros y me penetró despacio, podía sentir cada aro que ingresaba y se me iba el alma con cada bombeada, sus manos me acariciaban la espalda y el pecho mientras yo gemía como una gata de tanto placer. Luego él se acostó boca arriba y yo me sentaba encima de su enorme pija, comiéndomela entera y restregando mis nalgas en sus huevos, después me cogió patas al hombro y me la metió con fuerza hasta que eyaculó dentro de mi culo. Le quité el condón y me tomé su leche caliente y le chupé todo el pene, él estaba feliz.

Continuamos teniendo sexo toda la noche y fue maravilloso, en la mañana llamé a mi trabajo y me reporte enfermo y volví a la cama con mi amante quien me continuó penetrando hasta media mañana. Mi culo y yo estábamos felices.

Al regresar a mi cuarto encontré a Javi sentado afuera.

— ¿Qué haces aquí, no te dije que te largaras?

— No puedo Víctor, te extraño y te necesito, déjame al menos demostrarte que te amo.

— Y cómo lo vas a demostrar? Ya no te necesito, tengo nueva pareja y somos felices.

— Déjame hacerte el amor una vez más para demostrártelo

Mi culo no quería mas penetradas, pero Javi al menos merecía una despedida digna como pareja y acepté, entramos al cuarto y me desnudé delante de él, luego él también se desnudó y le comencé a chupar esa deliciosa verga y Javi me lamió las nalgas y mi ano irritado y me penetró cómo me gusta, como él lo sabe hacer y me hizo delirar de pasión. El culo me ardía de tantas penetradas pero la pija de Javi valía la pena, sentirla sin condón es divino, al natural. Sentí su chorro de semen dentro de mi culo y lo apreté para que no saliera nada, luego me besó en la boca y caí a sus pies. Ahora somos amantes, él tiene su mujer y yo tengo mi pareja, pero de vez en cuando nos entregamos a la pasión del sexo.

Víctor

Mi primo Javi

Esta es la historia  de la relación que surgió entre dos primos de la misma forma, como se conocieron, como se reencontraron y como están ahora.

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