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La Página de Bedri
Relatos prohibidos
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A menudo sueño que alguien se esconde en secreto en la habitación cuando entro en un cuarto de hotel donde me encuentro con uno de mis amantes negros. Apenas pasamos unos metros más allá de la puerta antes de que me tomen en sus brazos y me besen. Normalmente devuelvo ese beso con entusiasmo mientras envuelvo mis brazos alrededor de sus cuellos y presiono mi cuerpo contra los suyos.

Esos hombres traviesos casi siempre tienen ya la polla muy dura cuando me abrazan. Creo que les excita tomar a la mujer de otro hombre y seducirla en una habitación de hotel sin que él lo sepa. Sé que me excita estar allí, sin que mi marido lo sepa. Normalmente voy totalmente desnuda bajo mi vestido, así que me tocaría el culo desnudo mientras nos besamos y él sube sus manos por mis piernas y me levanta la falda. Si está lo suficientemente cerca, podría notar algo de humedad en el interior de mis muslos.

Luego me dará la vuelta para poder abrirme el vestido. Me gusta sostener el vestido con las manos mientras me doy la vuelta, y luego dejarlo caer, y volver a sus brazos. Normalmente recibo un beso, luego doy un paso atrás y empiezo a pelearme con su cremallera. Me gusta detenerme a mitad de camino y frotar su polla dura a través de los pantalones, sonriéndole mientras lo hago.

Le abro la cremallera de los pantalones y se la empujo por las caderas. No lleva ropa interior, y tomo su polla en la palma de mi mano. Acaricio su enorme pene y luego tomo sus bolas con mis manos.

Me sienta en la silla y lo miro mientras beso su gran polla negra. Paso mi lengua a lo largo de ella, lamo la enorme cabeza hinchada mientras la rodeo con una mano lo más alejado posible, acaricio sus bolas con mi mano libre, y luego la meto en mi boca... ― ¡Chúpame la polla negra, zorra! No es extraño tener la boca estirada alrededor de una polla negra, nena. Muéstrame lo que sabes hacer. Hazlo bien y duro para que pueda metértela en ese coño de casada.

Me pone las manos en la cabeza y me acerca, me mete la polla más adentro de la boca...

Montana

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