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La P�gina de Bedri
�-Canciones-�
V�ctor Manuel
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La p�gina de Bedri
Canciones

Soy asturiano, por ello no ser�a extra�o que aqu� aparecieran canciones de V�ctor Manuel. Debe ser esa cercan�a geogr�fica lo que nos hace sentir de forma muy parecida. Suscribo plenamente canciones como Ay amor porque a veces as� me he sentido. Y como soy asturiano y algo bastante rojo pues esa Asturias consigue hacerme sentir algo muy fuerte muy dentro de mi. La planta 14 sigue acerc�ndome el dolor de todo un pueblo; no todos los asturiano somos mineros, a veces hasta discrepamos con ellos, pero en ciertos momento somos una pi�a solidaria. Me acerca tambi�n un esp�ritu que dese� que nunca se pierda. D�jame en paz es una canci�n con dedicatoria, a todos esos que se empe�an en salvarnos a�n en contra de nuestra voluntad y para ello nos sumergen en sus infiernos. Bailarina quiero dedic�rsela a un buen amigo al que veo entre los versos de esta canci�n de amor pero solo en algunas cosas. Y ahora solo quiero decirte que Soy un coraz�n tendido al sol, que Nada sabe tan dulce como tu boca, que Quiero abrazarte tanto y que no se A donde ir�n los besos y tu sabes porqu�.

Ay amor que despierta a las piedras
Ay de aquel que no te sienta alrededor
Ay amor que nos abres las puertas
Ay amor tan necesario como el sol...

cuando llamas estoy
a la hora que tu digas voy...

Tantas veces nos quitas la pena
como tantas es amargo tu sabor
Ay amor del jard�n yerbabuena
como espinas puede ser el desamor...

cuando llamas estoy
a la hora que t� digas voy...

Ay amor que despierta a las piedras
Ay amor que derriba fronteras

Si fueras posible amarrar
tenerte siempre cerca poderte controlar
saber cada paso que das
si sales o si entras si vienes o si vas
las narices a ense�ar
Ay amor como inmenso es el mar...
Es amor quien altera las venas
como inventa las mareas o la flor
Ay amor que nos tienes en vela
y a quien duerme se le para hasta el reloj...

cuando llamas estoy
a la hora que tu digas voy...

Ay amor como polvo de estrellas
Ay amor que derriba fronteras...
Si fueras posible amarrar
tenerte siempre cerca poderte controlar
saber cada paso que das
si sales o si entras si vienes o si vas
las narices a ense�ar
Ay amor como inmenso es el mar...
Ay amor que derriba fronteras...
Ay amor que despierta a las piedras...
Asturias, si yo pudiera,
si yo supiera cantarte.
Asturias verde de montes
y negra de minerales.

Yo soy un hombre del sur;
polvo, sol, fatiga y hambre
hambre de pan y horizontes,
hambre.

Bajo la piel resacada
r�os s�lidos de sangre
y el coraz�n asfixiado
sin vez para aliviarte.

Los hombros viejos,
los ojos ciegos de tanto mirarte
sin verte Asturias lejana
hija de mi misma madre.

Dos veces, dos has tenido
ocasi�n para jugarte
la vida en una partida
y las dos te las jugaste.

Qui�n derribar� ese �rbol
de Asturias ya sin ramaje
desnudo, seco, clavado;
con su ra�z entra�able.

Corre por toda Espa�a
crisp�ndonos de coraje
miras obreros del mundo
su silueta de recortarse.

Contra ese cielo impasible
verte tan inquebrantable
firme sobre roca firme
herida vibra su carne.

Millones de pu�os gritan
su c�lera por los aires
millones de corazones
golpean contra tus c�rceles.

Prepara tu salto �ltimo
l�vida muerte cobarde
prepara tu �ltimo salto
que Asturias est� aguard�ndote.

Sola en mitad de la tierra
hija de mi misma madre.

Sola en mitad de la tierra
hija de mi misma madre.
La Planta 14 en el pozo minero
de la tarde amarilla
tres hombres no volvieron
hay sirenas, lamentos
acompasados ayes
a la boca del pozo.
Dos mujeres de luto
anhelando dos cuerpos
y una madre que rumia
su agon�a en silencio,
es el tercero.

A las diez de la luna clara
se refleja en las sortijas
del patr�n reci�n llegado
con sombrero, gravedad
y su aburrido gesto.
El ha sido el primero
vendr�n gobernadores
alcaldes, ingenieros.
Tratar�n de calmar
la presentida viuda
que se muerde el pa�uelo
no sabr�n acercarse a la madre
que les mira con los ojos resecos.

A las dos el patr�n mirar� su reloj
los otros ya se fueron
y en un punto y aparte
esbozar� un fastidio
mientras piensa:
pero d�nde est�n estos.
Ha llegado tu relevo de bomberos
y a la una menos diez de la noche
el primer muerto.
Sentados en el suelo
los mineros se hacen cruces
y reniegan de Dios
qui�n dir�a les pillara
de sorpresa la tragedia repetida.

A veces el m�s bravo
se le queda mirando fijamente al patr�n
con dientes apretados
y el patr�n con sombrero
tiene dos polic�as a su lado
no hay cuidado.
Tres horas lentas pasan
y a la luz de las linternas asustadas
el cura con los ojos arrasados
al segundo le va uniendo,
sobre el pecho, las manos
y un chaval de quince a�os
mientras llora impotente
se abraza contra un �rbol
y el chofer del patr�n, con su gorra de plato
se siente desplazado
es un hombre prudente, bien domado.

El roc�o ha calado hasta los huesos
cuando sale el tercero
que recibe con sonrisa gris azul
la madrugada y con voces los mineros
mientras se abrazan todos
y uno de ellos, el m�s fiero
por no irse al patr�n
llora en el suelo.
�D�jame en paz!
que no me quiero salvar
y que me dejes mejor quemar
�D�jame en paz!
en el infierno no estoy tan mal.

Siempre aparece un redentor
para vendernos el favor
dice tener la soluci�n
para sacarnos del error.

No necesito de un tutor
prefiero equivocarme yo
no me prometan salvaci�n
que se me ablanda el coraz�n.

�D�jame en paz!
que no me quiero salvar
y que me dejes mejor quemar
�D�jame en paz!
en el infierno no estoy tan mal.

Para imponer su voluntad
sirve cualquier brutalidad
echa la historia para atr�s
en nombre de la libertad.

Hay una gran necesidad
t� y yo sabemos bien de qu�
que nos gobierne y alegar
y no se lo haga con los pies.

�D�jame en paz!
que no me quiero salvar
y que me dejes mejor quemar
�D�jame en paz!
en el infierno no estoy tan mal.
�D�jame en paz!

Cada pasado y su raz�n
y lo que me conviene o no
nadie pretenda disponer
lo que se debe o no creer.

Nunca aspir� a pensar por dos
ni por quinientos o un mill�n
tengo bastante con saber
como camino y junto a quien.
Baila baila baila bailarina
�l siempre espiando tras de una cortina
ese amor secreto que pretende y que le esquiva
que se escapa como el humo de puntillas
Baila baila baila bailarina
�l siempre espiando tras de una cortina
baila baila baila baila baila baila bailarina...

La vio crecer convertirse en mujer
desde peque�a estudiando ballet
siempre so�ando con ser lo que es
n�mero una mientras que �l...
de tramoyista siguiendo sus pies
en la penumbra asom�ndose
nunca pudieron sospechar de �l...
no es que presienta que est� en la vejez
que a los cuarenta ya no es tiempo de...
lo que incomoda son sus diecis�is
esa barrera que existe y no ve
no hay un mal gesto que le haga creer
que lo que siente no puede entender
en sus palabras no existe doblez
pero hay miradas que nunca interpreta bien...

Baila baila baila bailarina...

Pero ocurri� lo que puede pasar
que la ilusi�n como viene se va
en una moto la viene a buscar
les ve marchas entre un ruido infernal
desesperado se quiso colgar
se at� una cuerda y salt� del telar
ella bailaba, le vi� aterrizar
y fue a llevarle bombones al hospital...
Aunque soy un pobre diablo
casi siempre digo la verdad
como fuego abrasador
siempre quiero ser el que no soy.
No transcurre el tiempo junto a t�
no existe el reloj
no tiene sentido entre t� y yo...

Aunque soy un pobre diablo
se despierta el d�a y echo a andar
invencible de moral
qu� dif�cil es buscar la paz
convivir venciendo a los dem�s
nuestra sociedad
es un buen proyecto para el mal...
Dejo sangre en el papel
y todo lo que escribo
al d�a siguiente romper�a
si no fuera porque creo en t�, a pesar de todo
t� me hacer vivir, me hacer escribir
dejando el rastro de mi alma
y cada verso es un jir�n de piel...
Soy un coraz�n tendido al sol.

Aunque soy un pobre diablo
s� dos o tres cosas nada m�s
s� con qui�n no debo andar
tambi�n s� guardar fidelidad
s� quien son amigos de verdad
s� bien donde est�n
nunca piden nada y siempre dan...
Nada sabe tan dulce como su boca
me transporta a una nube cuando me toca.
La estela de su cuerpo te abre el camino
como una antorcha; tempestades,
desata mientras se escapa sobre su escoba.

Nada sabe tan dulce como su boca
tan s�lo alguna cosa que no se nombra.
Algunas veces paso por el mercado y le traigo rosas
o la miro despacio de arriba a abajo, se van las horas.

No soy un h�roe lo s� es f�cil como pueden ver
colgarse con esa mujer, pisar por donde pone el pie.
Qu� podr�a contar, que no imagin�is.
Mi patria, mi bandera, mi segunda piel
el lugar donde quiero volver, ...su boca, uh, uh, su boca.

Nada sabe tan dulce como su boca
te regala alegr�a si no te sobra
tiene bien se�alado su territorio como una loba
y adentro amigos que le recuerdan que no est� sola.

No soy un h�roe lo s� es f�cil como pueden ver
colgarse con esa mujer, pisar por donde pone el pie.
Qu� podr�a contar, que no imagin�is.
Mi patria, mi bandera, mi segunda piel
el lugar donde quiero volver, ...su boca, uh, uh, su boca.
Siento tu mano fr�a
correr despacio sobre mi piel
y tu pecho en mi pecho y tu desnudez
y olvido reproches que imagin�.

Vente conmigo al huerto
que est�n las rosas queriendo ver
la promesa que has roto para volver
y as� creer lo que les cont�.

Dije que te quer�a
como a nada en el mundo...
que segu�a tus pasos, tu caminar,
como un lobo en celo desde mi hogar
con la puerta abierta de par en par, de par en par
que ten�a en penumbra nuestro rinc�n en aquel sal�n
con dos cubiertos y tu canci�n
y con tus flores en el jarr�n.

Siento tu mano tibien que palmo a palmo besa mi piel
y tus brazos me enredan hoy como ayer
y en este nuevo d�a vuelvo a creer.

Vente conmigo al puerto
que hay una barca en el malec�n
con tu nombre pintado secando al sol
con tu mano grabada junto al tim�n.

Sabes que te quer�a
como a nada en el mundo...

Quero abrazarte tanto
con mis sentidos, con tanto amor
que no haya m�s sonido que el de mi voz
y mi cuerpo en el tuyo continuaci�n
y andar� la tierra como un romero buscando a Dios
y tendr� tu regazo, tu comprensi�n
y una casa peque�a para los dos.

Tu sabes que te quiero...
Tu beso tembloroso y programa doble cinco pesetas
en el momento justo nos enchufaban con la linterna
cu�ntos atardeceres por las callejas sin darse tregua
que distintos los besos cuando pasabas de ir a la escuela...

Del beso aquel de Judas que descubrimos sin darnos cuenta
junto a dos corazones atravesados por una flecha
cuando tir� su anillo el agua del r�o se volvi� negra
de �sto hace treinta y cinco y jam�s he vuelto a pisar su acera.

Ad�nde ir�n los besos que guardamos, que no damos
d�nde se va ese abrazo si no llegas nunca a darlo
d�nde ir�n tantas cosas que juramos un verano
bailando con la orquesta prometimos no olvidarnos.

Y el beso que te llega en aquella carta que nunca esperas
como no est� firmada miras destino a las compa�eras.
Todo el franc�s que supe y que sabr� nunca fue culpa de ella
le llamaban B.B. y yo la vi en "Babette se fue a la guerra".

Ad�nde ir�n los besos...