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La Página de Bedri
Concejos de Asturias
Colunga - Rutas
Situación del concejo de Cabranes

Rutas

Las rutas que ofrecemos en esta guía nos permiten disfrutar de la naturaleza, riqueza monumental, cultural y etnografía del Concejo de Colunga.

No son de especial dificultad, sin embargo, es necesario seguir algunas recomendaciones para la práctica de esta actividad al aire libre, así como seguir algunas normas de respeto hacia el medio ambiente y naturaleza.

Recomendaciones

Utiliza calzado y ropa adecuados, vete preparado para cambios meteorológicos, un forro polar o jersey y un chubasquero pueden mejorar situaciones imprevistas.

En el caso de las rutas por los acantilados del concejo, recordar que el suelo puede resultar resbaladizo y prestar especial atención a las mareas y estado de la mar.

  • Protégete del sol con gafas, gorro y protección solar.
  • Lleva agua suficiente y comida ligera que aporte energía.
  • Mantén informados a tus amigos y conocidos de la ruta prevista a realizar.
  • Lleva un teléfono móvil, y recuerda el número de emergencias: 112.
  • Respeto al medio ambiente
  • Deja el recorrido como te gusta encontrarlo: llévate tu basura.
  • No realices fuego.
  • Respeta las propiedades y costumbres de los lugareños.
  • Respeta la flora. No cojas nada: quizá no lo sepas y te estás llevando una especie vegetal en peligro de extinción.
  • Respeta la fauna. No asustes a los animales, ellos son quienes están en su medio.

Ruta de Cordobana

Itinerario: Carrandi-Braña La Gata-Llano de Llames-Busfrío-Cordobana
Recorrido: 4 horas aprox.
Desnivel: 250 metros
Dificultad: Media

Descripción del sendero: Desde Colunga cogemos la carretera AS-260 en dirección a Arriondas. Después de pasar el pueblo de Coceña nos desviaremos a la derecha hacia Carrandi. En la plaza junto a la iglesia y un bonito hórreo dejaremos nuestro coche. Descendemos por un ancho camino que nos lleva a una bifurcación de caminos. Seguimos el de la izquierda, que en descenso, nos lleva hasta el río Espasa. Cruzamos un rústico puente y ascendemos a la casería de Braña La Gata. El camino cruza ahora un hermoso bosque hasta la majada de Busfrío, campera  rica en manzanilla. Tomamos finalmente un camino empinado que nos lleva a la campera de Cordobana. El regreso lo realizamos por el mismo lugar.

Ruta Mirador del Fitu Picu Pienzu

Itinerario: Mirador del Fito (579 m. altitud) Picu Pienzu (1.161 m. altitud)
Recorrido: Entre 3 y 4 horas
Desnivel: 300 metros
Dificultad: Media

Descripción del sendero: Desde Colunga cogeremos la carretera AS260 en dirección a Arriondas. Tras 11 kms. de ascensión por la falda del Sueve llegaremos al Mirador del Fito, donde dejaremos el coche. Desde aquí un sendero nos llevará a través de un pinar en una leve ascensión para continuar por un pequeño bosque y bordeando la ladera llegamos a la Majada de Bustacu, extensas praderas con una buena fuente. Desde aquí vemos el resto de la ascensión y seguimos por un buen camino que sube una canal a la fuente y majada de Mergullines. Seguimos subiendo y alcanzamos la collada de Beluenzu. Sólo nos queda remontar la empinada ladera y alcanzar la cumbre con la cruz de hierro en su cima.

Yacimiento de Icnitas de la playa de la Griega

Dificultad: Fácil
Recorrido: aprox. 500 metros.

El yacimiento de la playa de La Griega en Colunga es conocido principalmente porque en él se encuentran una de las mayores huellas de dinosaurios del mundo. Su visita es recomendable ya que constituye una de las rutas de mejor acceso del Jurásico de Asturias; el itinerario transcurre por una senda paralela al arenal.

El Museo del Jurásico de Asturias, inaugurado en el año 2004, está ubicado en sus cercanías, en un lugar elevado con buenas panorámicas de la costa, entre las localidades de Lastres y Colunga.

Para acceder al yacimiento de la playa de La Griega, en el concejo de Colunga, es necesario tomar la desviación a la misma desde la carretera autonómica AS-257 que une las localidades de Lastres y Colunga.

Inmediatamente después de cruzar un pequeño puente sobre el río Libardón, que desemboca en la playa, se encuentra un panel explicativo del itinerario, que muestra diversos aspectos geológicos de la zona, así como la situación de los puntos de interés que localizaremos a lo largo de la visita. Se inicia una bonita senda que en un corto recorrido nos conduce hasta una escalera que baja directamente a la zona del acantilado donde se encuentra uno de los yacimientos.

Se trata de un estrato de caliza gris que contiene icnitas de dinosaurios cuadrúpedos y algunas de bípedos, estas últimas más difáciles de reconocer, salvo en condiciones de luz apropiadas. La superficie del estrato de roca caliza se encuentra muy alterada debido a la presencia de un elevado número de pisadas de dinosaurios y a las múltiples fracturas cruzadas que la atraviesan.

La actual caliza constituyó hace ciento cincuenta millones de años el barro calcáreo del fondo de una laguna costera. En ella vivían pequeños organismos invertebrados, como gasterópodos y ostrácodos, cuyos restos fosilizados aparecen ahora incrustados en la roca. Las grandes depresiones más o menos redondeadas que se observan en el yacimiento corresponden a las huellas de los pies de un dinosaurio saurópodo de extraordinarias dimensiones. El diámetro de algunas de ellas llega a alcanzar 125 centímetros, lo que las convierte en unas de las de mayor tamaño encontradas hasta el momento. El contorno externo de las huellas muestra un reborde abultado que representaría el barro (ahora transformado en roca) que en el momento de producirse las huellas extruye hacia el exterior de las mismas.

Las icnitas de dinosaurios de la playa de La Griega fueron interpretadas inicialmente por dos investigadores alemanes en los años ochenta, como producidas por dinosaurios bípedo. Sin embargo, los estudios posteriores de las mismas contradicen esta hipótesis y nos permiten afirmar con seguridad que el autor de las enormes icnitas pertenece al grupo de los gigantescos saurópodos.

Sobre la misma superficie aparece además un rastro de pisadas con una longitud aproximada de cinco metros, atribuible a un dinosaurio saurópodo. De las ocho icnitas que componen dicho rastro, seis corresponden a las huellas de los pies. Las dos únicas impresiones de las extremidades delanteras muestran un contorno en forma de media luna y se sitúan ligeramente por delante de aquellos. Las huellas de los pies presentan formas ovaladas. A juzgar por la separación existente entre las icnitas del lado derecho e izquierdo del rastro, éste se ha clasificado como del tipo «Brontopodus». La estimación de la longitud del tronco (140 centímetros), así como el tamaño de las huellas, nos indican que el autor del rastro sería un saurópodo de pequeña talla.

Si la marea nos lo permite podemos realizar la vuelta por el arenal de la playa donde, a unos 150 metros nos encontramos con un bloque suelto de arenisca rojiza. En la superficie del mismo se pueden observar dos icnitas de dinosaurios cuadrúpedos conservadas como contramoldes y orientadas en direcciones opuestas. Una de las huellas corresponde al pie de un dinosaurio saurópodo. Muestra un contorno ovalado y en su parte delantera se pueden apreciar vagamente las impresiones de dedos muy cortos.

La otra icnita que se conserva en el bloque presenta una morfología en media luna y se ha atribuido también a un saurópodo, sin embargo no se puede precisar si ambas pertenecen al mismo individuo. Siguiendo llegaremos al inicio de la ruta.

Acantilados de Luces

Itinerario:
Distancia:
Recorrido:
Desnivel: 
Dificultad: media

Se debe tener especial precaución con el estado de las mareas. Recomendable acudir con un guía o persona que conozca el lugar.

Luces, pequeña localidad del concejo de Colunga, situada al oeste de la villa marinera de Lastres, en plena rasa costera, alberga en sus acantilados la evidencia del paso de fantásticos reptiles extintos, como los dinosaurios, y de otros vertebrados que han llegado hasta nuestros días.

Desde Colunga, capital del concejo, se toma la desviación que conduce a Lastres, siguiendo la carretera comarcal AS-257, hasta llegar a la localidad de Luces; desde aquí seguiremos por una carretera estrecha que conduce al faro de Lastres. Después de recorrer por la misma unos 650 metros, encontraremos en una curva a la derecha el indicador del faro, donde podemos aparcar el vehículo.

Se toma un camino que parte a la izquierda; éste termina en un espacio algo más amplio, con dos eucaliptos a cada lado, que da acceso a varias fincas, de las cuales debemos atravesar la de la derecha, en cuyo margen izquierdo se alzan tres pinos; por ella discurre el camino que comienza a descender y conduce directamente al pie del acantilado.

A unos pocos metros hacia el este del final del camino, en la misma base del acantilado, se encuentra un bloque suelto de arenisca, que conserva dos contramoldes de huellas de dinosaurios; uno de ellos tiene forma de media luna y se debe a la mano de un saurópodo de tamaño medio, mientras que el otro, de forma tridáctila, correspondería al pie izquierdo de un terópodo de gran talla, cuya altura de cadera se estima en torno a los 2,7 metros.

Siguiendo por el pie del acantilado, ahora hacia el oeste, unos 300 metros y prácticamente en el extremo de la ensenada de la pequeña playa arenosa que se desarrolla esporádicamente en ese lugar, se encuentran varios estratos de arenisca gris inclinados. Dos de ellos contienen huellas de dinosaurios. En la superficie del primero que encontramos aisladas, unas debidas a dinosaurios terópodos de mediano tamaño con una altura de cadera próxima a 1,3 metros y otras, de menor tamaño, posiblemente originadas por pequeños ornitópodos. En el segundo estrato se conservan diversas huellas aisladas pertenecientes a terópodos de gran tamaño, cuyas extremidades tuvieron una longitud entre 2 y 2,4 metros, así como un rastro constituido únicamente por las icnitas de los pies de un gran saurópodo; en las tres huellas completas que constituyen el rastro se aprecian las impresiones de los dedos. Todas las huellas de esta segunda capa presentan un alto grado de desgaste debido a la erosión marina, lo que dificulta su reconocimiento.

Además de las icnitas y rastros de dinosaurios, las rocas de estos acantilados han proporcionado diversos restos óseos atribuidos a tortugas, cocodrilos y peces, así como varios fragmentos de troncos de árboles.

Acantilados de Lastres

Dificultad de la ruta: media.

Se debe tener especial precaución con el estado de las mareas. Recomendable acudir con un guía o persona que conozca el lugar.

La pintoresca villa marinera de Lastres, en el concejo de Colunga, situada en un entorno privilegiado de la costa oriental de Asturias, constituye una extraordinaria atalaya abierta al mar Cantábrico. Las rocas jurásicas de sus alrededores han venido proporcionando a lo largo de estos últimos años múltiples evidencias fósiles (huellas y restos óseos) tanto de dinosaurios como de otros reptiles que convivieron con ellos como cocodrilos y tortugas. Muy próximo a esta localidad se encuentra, en la denominada rasa de San Telmo, el Museo del Jurásico de Asturias (MUJA).

El itinerario arranca desde el Mirador de San Roque, situado en el lugar más elevado de Lastres, junto a la ermita del mismo nombre. A partir de allí se toma un estrecho camino descendente que coincide con la denominada Senda del Castillo hasta alcanzar una pista de tierra más ancha. Una vez en ella, es necesario caminar por la misma hacia la izquierda hasta rebasar una fuente de piedra, ahora prácticamente seca. Un poco más adelante deberemos tomar una senda que parte hacia la derecha en fuerte descenso y nos conduce directamente hasta la base del acantilado.

A partir de aquí debemos de recorrer el pedrero hacia la derecha durante unos 135 metros hasta encontrar una plancha suelta de arenisca de disposición horizontal y de unos 4,5 metros de longitud en cuya superficie se dispone un rastro formado por un total de 14 icnitas tridáctilas de pequeño tamaño (unos 13 cm de longitud media) debidas al paso de un dinosaurio bípedo, probablemente un ornitópodo de pequeña talla; la altura de su cadera sobre el suelo sería de unos 65 centímetros. Las últimas seis huellas, tomadas en el sentido de la marcha del reptil, están más separadas entre sí que el resto, lo que evidencia un aumento en la velocidad de desplazamiento del mismo.

Cueto La Cotariella

Dificultad: fácil.

Desde Colunga, tomamos la carretera en dirección a Infiesto, a unos 10 km justo después de rebasar la localidad de Libardón a mano derecha encontramos una desviación por la carretera local que nos lleva hasta el pequeño pueblo de Fano.

Allí junto a la capilla de San Juan, a mano derecha, un camino nos conduce hasta unas casas, el barrio del «Juesu», desde aquí se ve ya el sendero que en aproximadamente un cuarto de hora nos deja en el paraje conocido como Cuetu La Cotariella (484 m de altitud), con excelentes vistas.

Se identifica claramente por una cruz colocada en su punto más alto.

Senda del castillo

En Lastres, en lo alto del pueblo, en el camino que une la Iglesia de Santa María de Sábada con el Mirador de San Roque, encontraremos una indicación del inicio de esta senda; también desde el propio Mirador una señal nos indica otro inicio de la senda por un estrecho camino descendente.

Ambos recorridos nos llevan en un breve paseo hasta una atalaya sobre el puerto de Lastres, donde se encuentran las antiguas ruinas del fuerte defensivo de Lastres, conocido como «El Castillo», del que aún se conservan parte de sus muros.

Fue construido a expensas de la familia Robledo, como defensa contra los ingleses en el año 1715, dotándolo de seis potentes cañones. Una vez en desuso, quedó abandonado y a principios del siglo pasado las grandes piedras de sillería fueron expoliadas y traídas a las calles de Lastres para hacer los peldaños de las escaleras actuales. Los cañones se utilizaron en la reconstrucción del puerto antiguo, colocándolos verticales para el amarre de las embarcaciones; dos de ellos con la ampliación del nuevo puerto fueron recuperados y desde hace poco tiempo se les adaptaron unos carros de madera, tal y como los tuvieron en su origen, y se exhiben en el propio puerto.

Ruta de Carrandi al Puertu del Sueve, P.R. AS-70

Itinerario: Mirador del Fito (579 m. altitud) Picu Pienzu (1.161 m. altitud)
Distancia: 7,1 Km.
Recorrido: Entre 3 y 4 horas
Desnivel: 300 metros
Dificultad: Media

Esta ruta parte del pueblo de Carrandi, que día a día se va convirtiendo en la verdadera capital del Sueve, y recorre buena parte de la vertiente norte de la sierra en un sentido circular, lo que nos permite abarcar una amplia extensión de la fachada marítima de este hermoso cordal. En la plaza de la iglesia, junto al panel indicador, a la izquierda una fuerte bajada a través de una pista hormigonada nos lleva hasta la casería de El Prau Grande, junto al río Espasa. Aquí, pocos metros a la izquierda de nuestra ruta, nos será posible contemplar uno de los pocos molinos de agua que quedan en Asturias, por fortuna perfectamente restaurado. También aquí tendremos ocasión de ver, a la derecha, el primero de los numerosos caleros (pozos donde antiguamente se quemaba la cal) que encontraremos en la ruta.

El camino comienza ahora un largo ascenso. Pronto llegaremos a la casería de Brañalagata, donde se nos brindará la ocasión de refrescarnos en la primera de las muchas fuentes con que cuenta esta ruta. La ascensión continúa a través de un bosque, que pronto se convierte en pradera. Pasamos la cabaña y el cierre de Cuetu el Toyu y continuamos a través de campos de pastizales hasta la segunda fuente del camino: La Retuerta, que tenemos a la izquierda. También a la izquierda, pegado al camino, veremos otro calero. Ya estamos llegando a la cumbre. En la majada de Busfríu nos apetecerá tumbarnos a descansar en la mullida hierba y tal vez mojarnos en las frescas aguas de la fuente que mana a pocos metros. Detrás de nosotros se alza el pico Cordobana, como un guardián de roca; delante, la pequeña mole del pico El Sol de Miguel. Hasta este pico hay un último esfuerzo, pero el premio bien merece la pena. La panorámica sobre la llanura costera y sobre el mar es realmente admirable. Pueblecitos tranquilos, playas, prados y tierras de cultivo, todo a nuestros pies como un inmenso mapa. Una tabla de orientación nos ayudará a identificar lo que vemos.

La bajada se inicia con un descenso acusado, dejando un nuevo calero a la izquierda, hasta el arroyo de la Riega el Fornu, y continúa hasta la fuente de Caspiulabarra. Luego, entre hermosos bosquecillos de acebos, alcanzamos la cabaña de La Cueva, cuya portilla hemos de cruzar. Seguimos en descenso. A la izquierda, en un paraje abierto de cara al amplio valle, se encuentra el albergue de montaña de Mata de Leño. Doscientos metros más abajo la casería de La Braña, con fuente y abrevadero. El camino continúa descendiendo, flanqueado por añosos castaños, ennegrecidos por el tiempo y las tormentas. Siempre bajando, llegamos al río Espasa, que cruzaremos por un singular puente hecho de un simple tronco. Es éste un lugar para sentarse a contemplarlo. Toda la naturaleza cantábrica —agua, bosque, prado y montaña— se resume en este pequeño rincón del Sueve. Es el lugar llamado Prau del Ríu.

Ahora hemos de comenzar a subir. El camino se encajona en la montaña como un cañón, entre robles, castaños y eucaliptos, hasta llegar a su último tramo, ya hormigonado. Enseguida veremos el cruce con el inicio del camino que tomamos al comienzo. Ya estamos en Carrandi de nuevo. Un recorrido tranquilo por esta ruta nos permitirá la observación de algunas especies de animales salvajes, muy en especial el jabalí, cuyas huellas podremos ver en todo momento. También es posible encontrar zorros, aves rapaces y algunos reptiles, dependiendo de la hora del día. En cuanto a la flora, predomina el bosque caducifolio: roble, castaño, avellano y fresno, con el añadido del eucalipto. Aunque la joya más valiosa es sin duda el acebo, por fortuna en recuperación.

En definitiva, un camino para ser paseado sin prisa y disfrutar de esta hermosa atalaya costera que es el Sueve.

Ruta entre playas

Itinerario: Lineal, Playa de La Isla - Huerres -San Juan de Duz -Playa de La Griega
Distancia: 5 Km.
Recorrido:1 h. 30 m.
Desnivel:  59 m
Dificultad: Fácil

En la playa de La Isla, que dejaremos a nuestra derecha, en el barrio de La Arena, frente a la iglesia, seguiremos el ancho camino asfaltado que llanea entre casas. Pronto, en una bifurcación, seguiremos a la izquierda hasta la plaza del Horrón, hermoso lugar donde hay varios hórreos. Continuaremos el camino-pista asfaltado que asciende suavemente a la derecha entre las casas de El Castro. A la derecha del camino nos quedará  una fuente de agua potable. El camino desciende  en un corto tramo dando vista al mar  Cantábrico, así como al pueblo de Lastres, al que divisaremos al frente. Pronto el camino nos acerca a un nuevo cruce. Continuaremos por el ancho de la derecha. Enseguida nos quedará, a nuestra derecha, las antiguas escuelas públicas y la colonia escolar, hoy convertida en albergue de peregrinos. Seguimos de frente llaneando a través del barrio de La Colonia y dejamos a la derecha el sendero que nos guía a través de la ruta Misterios del Mar. Continuamos llaneando a través del barrio de La Colonia. Enseguida, a la derecha, nos quedará la fuente y lavadero de La Caleya. Pronto alcanzamos el cruce de caminos de Les Cabañes. Continuaremos por el ancho de Les Llagunes, que llanea a la derecha, entre fincas cercadas. Enseguida, en una bifurcación, continuaremos por el menos marcado de la izquierda. Entre fincas cercadas, con firme de piedra y tierra, entre bonita vegetación y llaneando a través del camino de La Moría, vamos dando vista, al frente, al pueblo de Huerres. Enseguida, en un cruce, hemos de seguir el camino de la derecha, para al poco, en una bifurcación, continuar por el de la izquierda, y a los pocos metros continuar el que sigue al frente y, entre acebos y espesa vegetación, nos acerca a la plaza de La Estadía, en Huerres. A la derecha, junto a la carretera, podremos ver un abrevadero y característico potro de herrar. Aquí, en la plaza de este típico lugar asturiano, finaliza la ruta Misterios del Mar. Nosotros continuamos descendiendo ahora por la carretera hacia la izquierda, en dirección a Colunga.

Arriba, a la derecha, nos irá quedando el barrio del Cuetu. La carretera desciende en un corto tramo rodeando el barrio de La Torre, que nos irá quedando a nuestra izquierda. En fácil andar, a través de una bella zona de fincas, llegamos al cruce de caminos de El Foyu. Aquí dejamos la carretera y seguimos ahora por un ancho camino-pista asfaltado que sale a la derecha y que, entre fincas y pomaradas, nos acerca hasta el campo de la iglesia de San Juan de Duz, a la que ya vamos dando vista. La dejaremos a nuestra derecha para continuar llaneando, llevando ahora también a nuestra derecha el muro de cierre del palacio de San Juan, al que iremos dando vuelta. Pronto, en un cruce, frente a la entrada principal del palacio, seguiremos la pista de la derecha que continúa rodeándolo hasta su final, junto a la capilla del palacio. Aquí, tomaremos en suave descenso el ancho camino de piedra y tierra de la Caleya de la Miyar, que sale a la izquierda y discurre entre  las casas de La Riestra. Pronto, a la izquierda, nos quedará una fuente y un lavadero, así como veremos abajo, y al fondo, la ría de Colunga y el campo municipal de fútbol de Santianes. Un corto descenso entre arbolado nos conduce junto a la ría de Colunga, frente al camping Costa Verde, donde, por su margen derecha, llanearemos entre fincas, monte y ría, hasta el lugar conocido antiguamente como pozu de Los Cámbaros, junto al puente y acceso a la playa de La Griega, lugar de inicio de la ruta de los Dinosaurios.

Ruta de Gobiendes P.R. AS-15

Itinerario: Lineal, Espinas - Loreto - Coceña- Gobiendes - Loroñe
Distancia: 6 Km.
Recorrido: 1 h. 45 m.
Desnivel:  De subida, 68 m, de bajada, 73 m.
Dificultad: Fácil

En Colunga, junto a la iglesia y el Centro de Recepción de Visitantes, iniciamos el recorrido por la carretera N-632 en dirección a Ribadesella, por la que seguiremos unos 60 m para tomar, a la izquierda, una calle paralela que asciende en un corto tramo separado de la N-632 por un muro. A partir de aquí, continuamos por el ancho camino asfaltado del asilo, que atraviesa una bella zona entre casas y fincas cercadas. De fácil andar, después de un pequeño llano asciende en un corto tramo y de nuevo llanea hasta acercarnos al cruce de la Castañar de Espinas, junto al Asilo de Colunga, lugar que fácilmente identificaremos porque entre cinco troncos de un castaño partido por una tormenta y situado en una pequeña rotonda hay una imagen en piedra de la Virgen de Loreto. Aquí hemos de seguir unos pocos metros por la carretera de la derecha para enseguida continuar por el tramo de la antigua carretera que, entre casas, nos acerca a la N-632, a la que cruzaremos para continuar por el ancho camino-pista asfaltado del frente, que discurre entre las casas de Loreto y nos acerca a un cruce. A unos pocos metros a la derecha veremos la capilla y campo de Loreto. De nuevo en el cruce hemos de continuar por el ancho camino de la izquierda, que llanea entre fincas y desde el cual la panorámica que se nos ofrece sobre el monte Sueve es realmente amplia. En una bifurcación, continuaremos por el más ancho y marcado de la izquierda, que pasa justo detrás del colegio público Braulio Vigón y, entre fincas y algunas naves, nos acerca hasta la carretera AS-260, a la que hemos de cruzar para continuar por el camino del frente, que pronto nos acerca a un cruce, junto a un eucaliptal ya próximo a las casas de Covián. Dejando un tendejón a la izquierda, seguiremos ahora por el ancho camino de la derecha, de muy fácil andar y que después de cruzar la autovía por puente nos acerca al pueblo de Coceña, donde, a la derecha del camino, encontraremos una buena fuente de agua potable. El ancho camino llano, de firme cómodo, atraviesa las casas de Coceña de Abajo. Aunque salen dos caminos a la derecha, hemos de continuar por el más ancho del frente, que enseguida nos acerca a un nuevo cruce, junto a una casa, cuadra y hórreo, junto al lavadero y abrevadero, a los que dejaremos a la derecha, donde descenderemos por el ancho camino de la izquierda que entre casas nos acerca hasta la capilla y campo de Santa Lucía, en Coceña de Arriba. Es éste un hermoso lugar, con arbolado, rodeado de un pintoresco conjunto de hórreos. En el cruce con la carretera AS-260 hay a la izquierda una nueva fuente de agua potable.

Continuaremos ahora por la carretera AS-260, hacia la izquierda en dirección al Mirador del Fito. A nuestra derecha nos quedarán unas casas típicas, así como otro bonito conjunto de hórreos.  Enseguida, en una curva, nos quedará a la derecha la fuente y abrevadero de La Fuentequina. Pronto llegamos al cruce de carreteras de La Revueltona, donde a la derecha sale el  desvío hacia Carrandi. Seguiremos por la AS-260 a la izquierda unos 100 metros para tomar, a la derecha, un ancho camino hormigonado que se adentra en el monte y asciende entre alta y espesa vegetación. Al poco, el camino llanea. Seguiremos en un cruce el camino de zahorra de la izquierda, para continuar en otra bifurcación a la derecha, junto a la finca cercada de Las Brisas, ya en Gobiendes, y continuar de frente hasta las casas de El Charcal. Seguiremos ahora por asfalto llaneando a la derecha unos 100 metros para, en un nuevo cruce, continuar por el camino asfaltado de la izquierda, que nos acerca hasta el cruce y casas de Los Pedregales. Es ésta una zona donde la panorámica que se nos ofrece sobre mar y montaña es bella y amplia. Hemos de continuar por el camino de la derecha que discurre entre bonitas casas, hórreos y paneras. En un nuevo cruce continuaremos por el camino de la izquierda y nos acerca hasta las casas de La Zampudia, donde, a la izquierda del camino, hay una fuente de agua potable y un abrevadero. Rebasado este lugar, en un nuevo cruce, seguiremos el camino de la izquierda que nos acerca directamente hasta el Campo la Laina, junto a las antiguas escuelas públicas de Gobiendes, ahora Centro de Interpretación de la Sierra del Sueve, a unos 00 metros al frente la iglesia prerrománica de Santiago, a la que bien merece la pena visitar. Emplazada en una hermosa atalaya, la panorámica es amplia en todas direcciones, alcanzando una bella zona de costa cantábrica con el monte Sueve casi al lado. De nuevo en el cruce de El Campo la Laina, dejando el Centro de Interpretación a la izquierda, seguimos ahora un ancho camino de buen firme, desde el que también podremos contemplar una bella vista. Enseguida, a la izquierda, nos quedará el palacio de Gobiendes. El camino hormigonado desciende pronunciadamente por el Altu del Caleyón en un tramo entre fincas y nos acerca, salvando una pronunciada curva, al río Espasa, al que cruzamos por puente para seguir entre las casas, dejando un hórreo a la derecha, y cruzar el arroyo de La Cueva para acercarnos al barrio de La Ermita, junto a la capilla, que nos quedará a la derecha. Continuaremos ahora a la izquierda por el ancho camino-pista asfaltado de la Caleya de Soto, que nos acerca directamente a la carretera AS-260, junto al puente y río Espasa, a la entrada de Loroñe.

Ruta de La Riera P.R. AS-136

Itinerario: Circular, Colunga - El Carril -La Riera - Friera - Colunga
Distancia: 5,5 Km.
Recorrido: 1 h. 40 m.
Desnivel:  62 m
Dificultad: Fácil

En el parque, junto a la Oficina de Turismo, que dejaremos a nuestra derecha, así como la pequeña plaza que alberga la estatua del doctor Grande Covián, tomaremos la antigua calle Real, hoy dedicada al insigne científico, para continuar por la misma hacia el barrio de Santa Ana, donde a la entrada del mismo y al final de la calle se encuentra la capilla dedicada a la Virgen de Santa Ana. En el cruce, seguiremos de frente para descender por la cuesta del Carril hasta su final, en la carretera N-632, a la que cruzaremos para continuar por la carretera AS-258 a través del barrio del Solrivero. Pronto cruzaremos por un puente el río Libardón, para continuaren llano disfrutando de esta bella zona de Colunga. Enseguida, en un cruce, seguiremos la misma carretera a la izquierda hasta el puente de la autovía, en El Taquín, para, a los pocos metros de rebasarlo, tomar a la derecha un marcado camino típico asturiano que se adentra entre fincas. A los pocos metros, seguiremos el ascendente de la izquierda, conocido como «camín real», que discurre entre fincas. Pronto, en un cruce, seguiremos ascendiendo por el de enfrente. Enseguida, a la derecha nos quedarán las antiguas escuelas públicas de La Riera, así como el depósito de agua de bombeo para las poblaciones de Colunga, Lastres y Luces, agua proveniente del manantial de Obaya, en Gobiendes.

Al poco, a la izquierda del camino nos quedará en estado semirruinoso el palacio de La Riera. Ahora el camino llanea a través de una loma y la panorámica que se nos ofrece en todas direcciones es realmente espectacular. Abajo, al fondo, podremos contemplar restos de las antiguas edificaciones del campo de aviación de la guerra civil. También los pueblos de Sales y Llué, éste en lo alto. A la izquierda, abajo, el pueblo de La Riera. Al fondo, en lo alto, el monte Sueve. A nuestra espalda, el barrio de Friera, y al fondo, Colunga. El camino continúa entre fincas. Pronto llegaremos a La Barreda, lugar que identificaremos porque a la izquierda nos quedará una cuadra de ganado de grandes dimensiones. Casi al frente, el pueblo de Pis, al que iremos dando vista. El camino desciende suavemente hasta la campera de Roque, donde, ahora por pista de zahorra, alcanzaremos el cruce de la pista de Peandi y Villaescusa. Descenderemos por la pista de la izquierda que nos acerca, a través de La Teyera, a la carretera AS-258, en el barrio de La Viña, en La Riera de Allá. Cruzamos la carretera continuando por el camino hormigonado del frente que desciende a través de La Meredal y nos acerca hasta el río Libardón, al que cruzaremos por puente. Es éste un bonito lugar en el centro del pueblo de La Riera, en pleno valle. Continuamos llaneando entre las casas de La Nozaleda, para continuar en un cruce por el camino de la izquierda, y a los pocos metros continuar, también a la izquierda, y cruzar de nuevo el río por puente para alcanzar los barrios de Llangucha y La Pride, donde se encuentra la iglesia parroquial de Santa María de Bierces. En un cruce, en una pequeña plaza, dejando la iglesia a la derecha, ascenderemos por el camino de la izquierda para alcanzar de nuevo la carretera AS-258, en La Riera de Acá.

Seguiremos por la misma a la derecha unos pocos metros hasta la curva, para tomar a la derecha el ancho camino de El Castru, que con firme de piedra y tierra discurre entre fincas y cruza de nuevo por puente el río para, al poco, en una bifurcación, continuar a la derecha por el camino de la Ería de Sienra, que discurre entre arbolado y alta y espesa vegetación hasta un cruce de caminos. Hemos de tomar ahora el de la izquierda, que nos acerca hasta las casas de Friera, a las que ya venimos dando vista. Seguiremos ahora la ancha pista de la izquierda, que cruza bajo la autovía y discurre llaneando entre casas y nos acerca a la plaza del mercado de ganados, ya en Colunga, y que dejaremos a nuestra derecha para, en un cruce, junto a un bar restaurante que nos quedará a la derecha, ascender por asfalto a través de la Cuesta del Mercau hasta la N-632, frente a la plaza del Monumento. A partir de aquí, a la derecha por casco urbano unos doscientos metros, nos acercamos hasta la plaza de la iglesia y parque de Colunga.

Ruta Misterios del Mar P.R. AS-196

Dificultad del sendero: media

Itinerario: Lineal, Huerres - Los Tenreros - La Raposera - La Isla
Distancia:
Recorrido: 1 h. 30 m. (ida)
Desnivel: 
Dificultad: Fácil

El mar será el eterno compañero de vuestro paseo por la Ruta de los Misterios del Mar.

Comenzaréis el recorrido en la localidad colunguesa de Huerres, donde el panel de inicio de la ruta, situado en las proximidades de la plaza del pueblo, os indicará las características del recorrido.

Tras caminar unos metros entre las casas, os encontraréis con una desviación a la izquierda que os conducirá, durante unos 500 metros, por un camino de tierra en dirección a la costa. El recorrido transita contiguo al mar aproximadamente unos 2 km, a través de los cuales podréis observar la inmensidad del océano y la cercanía de éste a la imponente sierra del Sueve, con sus más de 1.000 metros de altura.

Dependiendo de la hora del día que escojáis para hacer la ruta, quizá podáis observar las labores de faena de alguno de los barcos con base en el cercano puerto de Lastres, el cual aparecerá a vuestra vista aproximadamente en el punto intermedio del recorrido.

Si no tenéis prisa por llegar, os aconsejamos que os detengáis unos minutos a descansar en los bancos instalados al efecto a lo largo de la ruta, y aprovechéis para escudriñar las olas en busca de delfines u otras especies de cetáceos que se dejan ver por estas aguas. Tal vez con un poco de suerte podáis divisar el cuerpo flotante de alguno de los míticos calamares gigantes «kraken», que en alguna ocasión han sido hallados varados en este área de la Costa  Jurásica Asturiana.

Son pocos los metros que os separan del final de la ruta, siendo el principal punto de referencia para percatarse de ello el islote de la playa del pueblo de La Isla. Esta localidad es un lugar perfecto para relajarse de la fatiga del camino, tomando un baño reparador o  dando un tranquilo paseo por la arena de una de las playas más hermosas de Asturias.

Faro de Cabo Lastres

Itinerario:
Distancia:
Recorrido:
Desnivel: 
Dificultad: Fácil

Desde el Mirador de San Roque, en lo alto de la localidad de Lastres, un sendero que en su inicio bordea el área recreativa del mismo nombre nos conduce en un recorrido de unos 3 km por caminos rurales hasta el pueblo de Luces. Atravesando éste y ya siguiendo la señalización llegaremos hasta el Faro del Cabo de Lastres. La linterna que se esconde en el interior de esta torre cilíndrica emite destellos equidistantes cada 12 segundos, con un alcance medio de 23 millas. Desde el faro hacia poniente se domina una excelente vista de los acantilados que se extienden desde la playa de Rodiles hasta la Punta de Tazones, cuyo faro se domina a simple vista. Hacia el este la  vista alcanza hasta Punta Misiera, que esconde la villa de Lastres.