1 yogur natural
3 medidas de harina
2 medidas de azúcar
media medida de aceite de oliva
2 sobres de levadura química
3 huevos con su clara
1 limón (la ralladura de su piel y todo su zumo)
mantequilla para untar el molde

Juntar todos los ingredientes en un bol (o recipiente parecido) más grande de lo necesario y amasar con una batidora de mano hasta que la mezcla sea uniforme.

Precalentar el horno a máxima temperatura durante 5 minutos. Se puede mejorar con fruta en almíbar.

Untar bien el molde con mantequilla, y poner la mezcla, vaciándola desde el centro del molde dejando que ella sola se nivele.

Poner al nivel central del horno, cerrar la puerta y ajustar la temperatura a repostería (mínimo en gas con unos 160ºC) durante 45 o 50 minutos.

Cuando, sin abrir el horno, se vea dorado por encima, comprobar pinchando (con un pincho de brocheta o algo similar) hasta que salga seco. Abrir pocas veces la puerta del horno. La cocción total suele durar entre 60 y 65 minutos.

Sacar del horno, dejar enfriar y desmoldar (la parte superior debe quedar abajo si se mejora con fruta en almíbar).

Servir a temperatura ambiente.

Las medidas se refieren a la capacidad del envase del yogur.

Untar de mantequilla solo los lados del molde. El fondo untarlo con caramelo líquido tipo Alsa, Royal o similar. Colocar encima del caramelo la fruta elegida, intentando cubrir la máxima superficie posible. Pueden usarse medios melocotones, media peras o rodajas de piña. Suele dar mejor resultado con piña. Poner por encima la mezcla, asegurándose de llenar todos los huecos entre trozos de fruta.